El punto principal a tener en cuenta es que el cuerpo necesita nutrirse de todo. Es importantísima la variedad para una buena nutrición. Un cuerpo adulto manteniendo una dieta equilibrada necesita, al menos dos raciones diarias de verdura, de 2 a 3 raciones de fruta y de 2 a 3 raciones de alimentos ricos en proteínas (como por ejemplo la carne y el pollo), además de cereales o legumbres. Por otro lado, es importante evitar los alimentos con azúcar, gaseosas o harinas procesadas.

La importancia de una dieta equilibrada radica principalmente en que proporciona una alimentación saludable que previene ciertas enfermedades. En muchos casos, estas enfermedades pueden llegar a ser crónicas como por ejemplo la diabetes, la obesidad o incluso enfermedades cardiovasculares.

Beneficios de una alimentación equilibrada

• Una alimentación sana hace que el organismo funcione de la mejor forma posible. Esta cubre las necesidades fisiológicas básicas y reduce el riesgo de padecer enfermedades.
• Llevar una mala alimentación con exceso de frituras y rebozados se asocia directamente con algunas enfermedades y según la OMS, 2,7 millones de personas que fallecen todos los años no llevaban una buena alimentación.

Consejos para tener una correcta alimentación

• Hacer cinco comidas al día y comer despacio.
• Beber dos litros de agua al día.
• Planificar la compra para evitar compras impulsivas e innecesarias.
• Elegir opciones integrales ya que se componen principalmente de fibra.
• Tomar cinco raciones de fruta y verdura al día.
• Evitar el azúcar y el consumo de alcohol en exceso.
• Cocinar con aceite de oliva virgen extra ya que contiene ácido oleico y omega-3. Son grasas buenas para el organismo.
• No saltarse nunca el desayuno ya que es una de las comidas más importantes del día. Es importante preparar un desayuno rico en vitaminas y nutrientes ya que brindan la fuerza necesaria durante el día.
• Tomar lácteos a diario que aportarán el calcio necesario para los huesos.